viernes, 4 de septiembre de 2009

Matar es matar.

He de reconocer que me embarga la rabia cuando alguien o un grupo atenta contra la vida de otras personas. Cuando se vulneran los derechos más básicos…pero no creo que la mejor solución sea pagar con la misma moneda, ¿nos hace mejores que ellos la venganza?, en verdad caemos en lo mismo que tanto parece que rechazamos, pero matar es matar, da igual en qué contexto lo hagas, es interrumpir una vida. Cuando lo haces porque la tuya está amenazada, es defensa propia, pero cuando lo haces por castigo, es venganza y se torna en cadena que eslabón a eslabón sigue alimentando el odio y la rabia.
Matar es matar, que mates al peor de los seres no quita que tu acto sea cruel e inhumano, no hace que todos los actos que cometió se deshagan, sólo hace callar bocas pidiendo justicia, pero ¿qué se gana con ello?…¿en verdad es la mejor manera de enseñar que los actos que cometió están mal?, porque al consumir esa justicia ¿no damos una opción moral a cuando es bueno matar o no?, y al hacerlo ¿no dejamos en manos de la libertad de interpretar esa moral?…al final damos por hecho que matar es bueno, sólo según quién mate, o desde que ámbito lo haga, o bajo que poder se ejerza. Pero el hecho es que matar es matar y nos convierte en asesinos.